lunes, 10 de septiembre de 2012

Comienzos

Hay muy pocos comienzos. Oh, ciertas cosas parecen comienzos. Alguien sube el telón, mueve el primer peón o dispara el primer tiro*, pero eso no es el comienzo. La obra, la partida o la guerra no son más que una ventanita que da a una cadena de acontecimientos que pueden remontarse a miles de años atrás. Lo realmente importante es que antes siempre hay algo. Siempre estamos ante un caso de Y Ahora, Sigan Leyendo.

 *Probablemente contra el primer peón.

Bienvenido, visitante anónimo. ¿Hola? ¿Hay alguien? ¿No? Bueno, el espectáculo debe continuar igualmente. El espectáculo siempre continúa, no importa lo que pase. Y si no que le pregunten a los que intentaron seguir una obra después de un cambiazo entre actos que acabó con cuatro actores entre bambalinas, sustituidos por tres brujas y una Muerte de verdad.

La cuestión es, en todo caso, que tras un año y medio de silencio (y una semana añadida, aunque supongo que no es relevante), creo que es hora ya de seguir plasmando aquí cosas que salen de la chistera. Puede que haya algunos cambios, puede que esto se llene más de veneno y menos de palabras dulces y bellas metáforas (espera, ¿alguna vez hubo alguna?... Eso es lo de menos) O puede que no. ¿Quién sabe?

Por lo pronto, espero poder abrir la válvula una vez por semana, y a ver si dura el tema. Para la próxima semana ya está escogido el tema, solo falta redactarlo. Y no a todos gustará. Pero como esto no lo lee nadie (o casi), si no te gusta, siempre puedes no volver por aquí. O sí, a lo mejor sí te gusta lo siguiente que leas. La chistera es mágica, pero el que la empuña no es mago y no controla lo que de ella sale.